Los Orígenes y Fundamentos del Psicoanálisis Explorando las Profundidades de la Mente


A principios del siglo XX, Sigmund Freud, un médico austriaco, se destacó como pionero en esta teoría innovadora. Su sólida formación en neurología y su experiencia clínica lo condujeron a investigar las causas de las enfermedades mentales y las neurosis que afectaban a sus pacientes. Freud se sentía particularmente intrigado por el papel del inconsciente en la psicopatología, lo cual lo llevó a desarrollar ideas verdaderamente revolucionarias sobre la mente humana.
La piedra angular de la teoría freudiana es la noción del inconsciente.
Según Freud, gran parte de nuestra mente funciona fuera de la esfera de nuestra conciencia consciente. En el inconsciente se encuentran almacenados deseos, impulsos y memorias reprimidas que pueden ejercer influencia sobre nuestro comportamiento y emociones sin que tengamos conocimiento de ello Es esencial destacar que, según Freud, las personas desarrollan mecanismos de defensa para reprimir o mantener en el inconsciente aspectos de sí mismos que consideran inapropiados o perturbadores. Estas partes reprimidas, con el tiempo, pueden dar lugar a problemas. Por lo tanto, la labor del psicoterapeuta consiste en desenterrar estos elementos para que dejen de ser perjudiciales. En resumen, el objetivo último es “hacer consciente lo inconsciente”.

Además, Freud propuso una división tripartita de la personalidad en el ello, el yo y el superyó. El ello representa los impulsos más primitivos y los deseos fundamentales, el yo es la parte consciente que actúa como intermediario entre el ello y el mundo exterior, mientras que el superyó representa la dimensión moral y ética de la personalidad. Por último, el análisis de los sueños ocupó un lugar central en el enfoque de Freud.

Él consideraba los sueños como una “puerta de entrada al inconsciente”. A través del análisis de los sueños, intentaba descifrar los deseos reprimidos y los conflictos subyacentes en la mente del paciente.

Es importante señalar que estos planteamientos surgieron en el siglo pasado y han experimentado numerosas modificaciones, dando lugar a diversas corrientes del psicoanálisis que han reinterpretado las teorías originales de Freud.

Es comúnmente reconocida la imagen estereotipada del paciente recostado en el diván -el nombre técnico del sofá utilizado en psicoterapia-, hablando sin cesar mientras el terapeuta toma notas en segundo plano. ¿Han tenido la oportunidad de ver esta representación? Si bien es una forma clásica de llevar a cabo la terapia, no es la única. Además, el nivel de participación del terapeuta puede variar significativamente según su formación y la escuela de psicoanálisis a la que esté afiliado. Lo único que puedo garantizarles es que el proceso será prolongado.

Dado su origen, el psicoanálisis fue diseñado como un proceso extenso destinado a permitir que las personas obtengan un profundo autoconocimiento, no necesariamente con el objetivo de resolver un problema específico.

Esto se debe en parte a la herramienta principal de los psicoanalistas, la “asociación libre”, una técnica que permite al paciente hablar sobre cualquier tema que se le ocurra, sin necesidad de que estos temas guarden una relación aparente entre sí. Por lo tanto, no es raro que el proceso de psicoanálisis pueda extenderse durante meses o incluso años.

Para concluir, me gustaría hacer una aclaración técnica. Aunque el psicoanálisis es una forma de abordar la mente humana, muchos psicoanalistas y teóricos de la psicología prefieren considerarlo como una teoría independiente y separada de la psicología.

Con esto, llegamos al final de nuestro recorrido por hoy. Espero que la información proporcionada haya sido de su agrado y utilidad. Si desean obtener más información sobre este u otros temas relacionados con la psicología, o si están interesados en iniciar un proceso de psicoterapia, no duden en ponerse en contacto conmigo a través del correo psiconvers25@gmail. com o llamando al número +57 3135578007